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En su reciente reunión en Londres, el Grupo de Trabajo del Departamento de Comunicación de los Sindicatos Mundiales, afirmó que, en el clima económico actual, con sus múltiples ataques a los derechos de los/las trabajadores, ha llegado el momento de que los sindicatos de los sectores públicos y privados se unan en solidaridad y defiendan los servicios públicos, servicios que crean comunidades fuertes, equitativas y sostenibles, y que benefician a todo el mundo.

Dicho Grupo de Trabajo está formado por representantes de la IE, CSI, ISP, ITF, UNI y las otras federaciones sindicales mundiales.

“Es hora de dar una respuesta global a los gobiernos que están llevando a cabo medidas que hacen recaer aún más la carga económica y social de la crisis económica sobre los hombros de las personas trabajadoras”, declaró David Cockfort, Secretario General de la Federación Internacional de los/las Trabajadores del Transporte y Presidente del Grupo de Trabajo.

Peter Waldorf, Secretario General de la Internacional de Servicios Públicos, que también asistió  a la reunión, concluyó: “En Egipto, los Estados Unidos, Grecia, el Reino Unido y en otras partes, los/las trabajadores están exigiendo un mundo en el que los salarios justos, los trabajos decentes, los servicios públicos esenciales y las voces de los/las ciudadanos/as se valoren más que los recortes en los impuestos, los bonus empresariales y los monopolios de los medios de comunicación”.

Como parte de la campaña mundial Servicios Públicos de Calidad, la Unión Nacional de Enfermeros/as (NNU), el sindicatos más grande de enfermeros/as en los EEUU, con 170.000 miembros, lanzó hace muy poco una campaña a nivel nacional para apoyar la implantación de un impuesto a las transacciones financieras.

Un instrumento tal, afirmó el sindicato, podría ayudar a pagar los daños que los bancos han ocasionado en los últimos años. La CSI y los sindicatos globales han buscado la implantación de este tipo de impuestos desde el comienzo de la actual crisis económica. Ahora, muchos gobiernos apoyan su implantación, especialmente en Europa, como un modo de hacer que el sector financiero pague su justa parte del coste de los servicios públicos que utiliza, y como un modo de controlar los ingresos excesivos.

Chuck Idelson, Director de Comunicación de la NNU, presentó las diversas iniciativas que los/las miembros del sindicato emprendieron para la campaña:

Por ejemplo, relacionado con Occupy Movement (Movimiento Ocupar), la NNU creo una videocampaña haciendo un llamamiento para que se haga responsables a los/las banqueros/as de sus actos.

Moviéndonos del plano nacional al mundial, una delegación de enfermeros/as asistió a la reunión del G-20 en Cannes y llevó a cabo una acción protesta junto con el actor Bill Nighy para pedir que los líderes mundiales implanten un impuesto a las transacciones financieras a nivel mundial.

Otras iniciativas locales para la campaña Servicios Públicos de Calidad incluyó manifestaciones y talleres en ciudades de todo el mundo, como por ejemplo Durban y Bangkok.

El Consejo de los Sindicatos Mundiales, que se reunirá en Ginebra la semana que viene, debatirá las recomendaciones y los informes de la Reunión del Grupo de Trabajo para determinar el futuro curso de acción colectiva sobre estos asuntos.