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El Sindicato de Educación Australiano (AEU), una de las afiliadas nacionales de la IE, ha rechazado enérgicamente las afirmaciones del líder de la oposición, Tony Abbott, según las cuales las escuelas públicas estarían recibiendo mucha más financiación que las escuelas privadas.

“Tony Abbott ha demostrado hoy que podría ser el primer ministro de las escuelas privadas”, expresó el Presidente Federal del AEU, Angelo Gavrielatos, en una declaración realizada el 20 de agosto."

“Los comentarios del Sr. Abbott ponen de manifiesto una ignorancia absoluta con respecto al trabajo realizado por la Revisión Gonski, donde se demuestra con toda claridad que el déficit de financiación en la educación está en las escuelas públicas.

“Tony Abbott no sólo ha admitido así que las escuelas públicas no van a recibir ni un céntimo de los 3,8 millones de dólares australianos (AUD) anuales que, según la Revisión Gonski, están necesitando con carácter de urgencia, sino que ya ha perfilado una serie de recortes en las escuelas que se estima rondan los 3.000 millones AUD.”

Gavrielatos dijo a continuación que los recortes de Abbott perjudicarían a los alumnos de las escuelas públicas de las zonas más desfavorecidas del país.

“Estos comentarios confirman hoy que el plan de Tony Abbott para las escuelas públicas es recortar la financiación, despedir a nada menos que uno de cada siete docentes e incrementar el número de alumnos por aula. Todas las escuelas se verán afectadas. Obviamente, Abbott no cree en la educación pública y lo que va a conseguir es que a los niños y niñas de todo el país les resulte más difícil recibir una educación de buena calidad.”

Compromiso sin sentido de la coalición

En respuesta al compromiso de la coalición, según el cual la situación de las escuelas no empeoraría con el Gobierno de Abbott, Gavrielatos añadió que se trata de una verdadera acrobacia o bien de una declaración sin sentido destinada a desviar las críticas con relación a las afirmaciones de que las escuelas públicas están recibiendo una financiación excesiva.

“Para que el compromiso tenga algún sentido”, observó, “la coalición tendría que renunciar a su promesa de aplicar recortes de miles de millones a las escuelas públicas, incluidas las de las comunidades más pobres del país.”

La coalición también tendría que estar dispuesta a aumentar considerablemente la financiación recurrente para las escuelas públicas que, en las actuales previsiones presupuestarias, se prevé disminuir en 673 millones AUD en términos reales para 2015-16.

“Estos recortes incluyen la financiación de la Alianza Nacional para las escuelas públicas y privadas en comunidades desfavorecidas”, dijo Gavrielatos. “Esa financiación supone una diferencia enorme para los estudiantes y las comunidades escolares.”

IE: la educación tiene que financiarse con fondos públicos

La IE ha unido su voz a los argumentos del sindicato. “Apoyamos plenamente a nuestros compañeros australianos en su lucha por la obtención de unas condiciones de trabajo decentes y una financiación adecuada para el sistema de educación pública”, expresó Fred van Leeuwen, Secretario General de la IE. “La IE insiste en que la educación es un derecho humano y que por lo tanto se requiere una financiación constante y suficiente de la educación, independientemente de cualquier crisis económica o reducción presupuestaria, con el fin de lograr que todos y todas puedan disfrutar de este derecho.”

La Resolución sobre el Financiamiento Continuo de la Educación Pública en medio de la Crisis Económica, adoptada en el 6º Congreso Mundial de la IE celebrado en Ciudad de Cabo, Sudáfrica, en julio de 2011, lamenta “el hecho de que muchos gobiernos, ante la creciente deuda pública y las limitaciones presupuestarias, que crecen exponencialmente como resultado del rescate del sector financiero, están adoptando medidas de austeridad que incluyen recortes a la financiación pública para la educación, la desregularización de la profesión docente, la privatización de la educación y la eliminación de los derechos de los empleados a la negociación colectiva”.

Reconoce que la IE está profundamente preocupada por los crecientes abusos promovidos por el Estado y por el hecho de que los docentes, otros trabajadores/as del servicio público y los sindicalistas estén siendo utilizados como chivos expiatorios durante el período de la crisis financiera mundial.

Hace también un llamamiento a todas las organizaciones miembro para que garanticen que la financiación de la educación pública siga siendo responsabilidad de su Gobierno y que ninguna forma de asociación público-privada ni de asociaciones de múltiples partes interesadas asuman esa responsabilidad.

Que la crisis no repercuta en el sector de la educación

Entre otras tareas, la resolución encomienda al Consejo Ejecutivo:

• Tratar de obtener un compromiso de parte de todos los Gobiernos en el sentido de proteger el sector educativo y los servicios públicos del impacto de este tipo de crisis financiera, y redoblar los esfuerzos globales en pos del logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y de los Objetivos de la Educación para Todos y Todas.
• Instar a los Gobiernos a que consideren la educación como un instrumento fundamental de las políticas sociales.
• Hacer un llamamiento a las organizaciones miembros a escala nacional, regional e internacional, para que intensifiquen su campaña, en colaboración con padres, alumnos y comunidades escolares y la sociedad civil en general, a favor de una educación de calidad, accesible, gratuita y financiada con fondos públicos, y promuevan la educación como un bien público y un derecho humano.

La Resolución completa de la IE puede consultarse aquí