Ei-iE

La Internacional de la Educación está profundamente preocupada por el aumento de la violencia militar entre Israel e Irán, así como por los continuos bombardeos y la inanición en Gaza.

El conflicto en curso ha provocado el cierre generalizado de las escuelas y ha interrumpido el acceso a la educación. Además, el alumnado, el profesorado y sus comunidades están siendo asesinados, heridos y desplazados mientras los dirigentes políticos no responden a los llamados a la paz y a las soluciones diplomáticas de alto al fuego. La Internacional de la Educación exige la protección de la educación y la salvaguarda de los niños, las niñas y los docentes y las docentes en todas las zonas afectadas. Como estipula la Resolución del Congreso de la IE sobre educación para la paz: “Las guerras y los conflictos son las mayores violaciones de los derechos humanos”. El Congreso de la IE destacó la “urgente necesidad de defender la paz, la democracia, los derechos humanos y los valores de la solidaridad y el humanismo como base de unas sociedades justas y equitativas”.

En el contexto del aumento global de los conflictos armados en todo el mundo, la IE hace un llamado constante a la paz, el desarme y un diálogo inclusivo, que cuente con la participación de representantes sindicales, basado en el derecho internacional y los derechos humanos. Defendemos el derecho de todos los pueblos, incluido el palestino, a la autodeterminación, la dignidad y la liberación de la opresión.

Basándonos en las experiencias presentes e históricas de nuestros miembros que sufren, bajo el imperialismo, esclavitud contemporánea, explotación, racismo, sexismo y toda clase de opresión, la IE exige:

• El alto al fuego inmediato en Gaza, Israel, Líbano e Irán a fin de proteger a la población civil y permitir la reapertura segura de las escuelas.
• El respeto de las escuelas como santuarios seguros que no deben ser atacados por ningún grupo armado.
• La protección de la educación en situaciones de emergencia, de conformidad con el derecho internacional humanitario, incluyendo el derecho de todos los niños, niñas y jóvenes a acceder a una educación segura y de calidad.
• La rendición de cuentas por las violaciones del derecho internacional, así como por los ataques a las escuelas , docentes y estudiantes.
• El acceso humanitario sin restricciones a todas las poblaciones afectadas, garantizando la prestación de servicios básicos y el apoyo psicosocial para el profesorado y el alumnado.
• Unos procesos de paz inclusivos que impliquen al personal docente, los sindicatos y la sociedad civil y que reconozcan el papel esencial que desempeña la educación en los esfuerzos de consolidación de la paz y de reconciliación.
• La inversión en sistemas educativos públicos como vía hacia el desarrollo sostenible, la igualdad y la resiliencia en el proceso de recuperación después del conflicto.
• La solidaridad con los trabajadores y las trabajadoras y las comunidades que se oponen a la ocupación, al autoritarismo y a la opresión sistémica en todas sus formas.

La IE insta a gobiernos, dirigentes políticos y organismos internacionales a renovar su compromiso con el multilateralismo, la paz y el respeto a la dignidad humana, basado ​​en los principios de democracia, autodeterminación, justicia social y equidad. Asimismo, la IE reafirma que la educación no solo constituye una herramienta para la paz, sino también para la liberación y la justicia. En el contexto de la ocupación y la opresión sistémica, la educación empodera a las comunidades para resistir y reconstruirse.

La IE se solidariza con todas las personas afectadas por la guerra y seguirá abogando por un mundo pacífico y justo donde las escuelas sigan siendo lugares seguros de alegría, aprendizaje y crecimiento.