Mensaje de solidaridad y apoyo al IMAK y al pueblo de Groenlandia
La Internacional de la Educación es una organización que se fundó sobre los principios universales de los derechos humanos, la democracia, la paz y la dignidad humana. Nuestra afiliación es el profesorado mundial, una profesión arraigada en nuestra federación sindical mundial, que se forjó en respuesta a los horrores de las guerras mundiales y a los brutales y opresivos sistemas coloniales que extraían riqueza por medio de la violencia.
La Internacional de la Educación existe para defender no solo los derechos de nuestra afiliación y estudiantado, sino también para mantener y defender un sistema multilateral, basado en normas, en el que todos los seres humanos vivan libres del miedo y la opresión y disfruten del derecho a la autodeterminación democrática y al respeto.
Este es el espíritu con el que hemos venido a Groenlandia con UTNORD (el Consejo Nórdico de Docentes del Norte), a invitación del sindicato nacional de docentes, IMAK, para transmitir nuestra solidaridad en un momento en el que las amenazas a su soberanía y seguridad se están intensificando.

Durante nuestra visita hemos escuchado relatos de docentes –quienes muchas veces dan clase en circunstancias complicadas y condiciones remotas– sobre las campañas de propaganda y desinformación cada vez más selectivas, amplificadas por políticos de extrema derecha, sobre los beneficios que les aportaría vender su nación y renunciar a los derechos de todas las generaciones futuras a decidir el futuro de sus recursos humanos y naturales.
Sin embargo, el pueblo groenlandés, personificado por el valiente profesorado groenlandeses, conoce la Historia y sabe cuándo su legado, su lengua y su identidad indígenas se ven amenazados, y sabe que no está solo en la defensa de sus derechos.
Las personas afiliadas a la Internacional de la Educación, y en especial el liderazgo de nuestro Grupo de Trabajo sobre Pueblos Indígenas, se suman a nosotros y nosotras para expresar toda nuestra solidaridad con IMAK, quienes construyen la nación de Groenlandia, en este momento crítico en el que rondan buques de guerra y se intensifican las amenazas. Nadie tiene derecho a “apropiarse de esa tierra, de ninguna manera” salvo el pueblo groenlandés que vive aquí y que ha sido el guardián de esta tierra durante siglos. Reiteramos nuestro compromiso de apoyar a IMAK ahora y en el futuro.
No están a la venta. No tolerarán ninguna intromisión. No están solos ni solas.
Puede encontrar mensajes de apoyo de nuestra afiliación a continuación: