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Internacional de la educación
Internacional de la educación

Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

publicado 25 noviembre 2014 actualizado 25 noviembre 2014

La violencia de género constituye una violación fundamental de los derechos humanos. Es una de las peores manifestaciones de la discriminación de género, que afecta desproporcionadamente a niñas y mujeres, constituyendo un obstáculo considerable para el logro de la igualdad de género. Es un fenómeno mundial carente de límites geográficos, culturales, étnicos, económicos o de otro tipo.

La violencia de género en la escuela constituye un serio obstáculo para la consecución de la Educación para Todos (EPT) y de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), y para el logro de la igualdad de género. Al tiempo que aceleramos nuestros esfuerzos para cumplir las metas de la EPT, y que elevamos nuestras ambiciones educativas para las niñas y los niños en el programa de desarrollo posterior a 2015, es fundamental que mantengamos nuestro compromiso para con la igualdad de género en la educación de calidad y a través de ésta.

La Internacional de la Educación  es miembro del Grupo de Trabajo Global sobre la violencia de género relacionada con la escuela, queayudará a galvanizar a la comunidad internacional para que adopte una posición firme contra este tipo de violencia, asimismo ayudará a establecer las normas para dar respuesta a esta violencia y promoverá la recopilación de evidencias para dar vigilancia a las tendencias y las mejoras en las prácticas.

Con ocasión de este Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, les invitamos a que actúen, uniéndose a los 16 días de Activismo contra la Violencia de Género, y a que sitúen la VGE entre las máximas prioridades del programa de desarrollo a fin de garantizar que las escuelas sean lugares seguros donde todos los niños y las niñas puedan aprender sin miedo. Todos y todas podemos participar en estos esfuerzos y contribuir a provocar un amplio efecto multiplicador. Las generaciones presente y futura de niñas y mujeres no se merecen menos.