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Internacional de la educación
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Grecia: las medidas de austeridad, grave amenaza para los derechos sindicales

publicado 9 febrero 2012 actualizado 10 febrero 2012

La IE y la Confederación Sindical Internacional (CSI) han condenado el estado actual de la negociación entre los gobiernos nacionales y la Troica (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional), por entender que tendrá unas consecuencias desastrosas para los salarios mínimos, los convenios colectivos y los derechos en Grecia.

Esta batería de medidas, impuestas como requisito previo a la concesión de un nuevo paquete de ayudas financieras, se ha excedido en la austeridad, por lo que requiere una contestación contundente del movimiento sindical europeo y mundial.

“¡No a las condiciones laborales de la Edad Media!”

El 7 de febrero, miles de griegos participaron en una huelga general y protestaron contra las nuevas medidas de austeridad cantando ¡No a las condiciones laborales de la Edad Media!.

Además, los dirigentes políticos griegos han aplazado su decisión sobre un paquete de austeridad que, entre otras cosas, contempla suavizar la protección del empleo público.

“Lo que se está jugando en Grecia es el futuro de los trabajadores de todos los sectores, en particular en Europa”, afirma Martin Rømer, director de la región europea de la IE, el Comité Sindical Europeo de la Educación (CSEE). “Es nuestro deber no permitir que un sistema financiero deficiente aproveche la oportunidad de la crisis griega para comprobar su capacidad de imponer a un país soberano la versión más salvaje del capitalismo”.

Refiriéndose a la declaración del CSEE publicada en octubre de 2011 y reclamando solidaridad con los trabajadores griegos, Rømer advierte: “Un año de austeridad en Grecia ha dejado claro que lo que se presenta como una cura no hace sino agravar la enfermedad. Es lo que tiene la austeridad: genera recesión, creando así más austeridad, lo cual a su vez agudiza la recesión. La Troica lo que ha hecho ha sido crear un círculo vicioso en el que los sectores más vulnerables de la sociedad pagan el precio más alto”.