Niños pequeños, grandes desafíos: los sindicatos de la educación se movilizan a favor del derecho a la educación infantil temprana
A pesar de su papel esencial, la educación de primera infancia (EPI) se ve socavada por una infrafinanciación crónica. El nivel de reconocimiento de la importancia de la educación infantil temprana, así como los salarios, la satisfacción laboral, las condiciones de trabajo y la situación del personal de la EPI, permanecen bajos. Al mismo tiempo, el sector privado se esfuerza por controlar el sector, llenando el vacío de financiación dejado por los gobiernos y profundizando así la brecha entre las personas privilegiadas y las desfavorecidas.
Decididos a cambiar esta situación, los sindicatos de la educación de todo el mundo se movilizan para fomentar el derecho a la educación infantil temprana y acabar con la escasez de personal docente en el sector.
El 15 de abril, las afiliadas de la Internacional de la Educación (IE) que organizan al personal de la EPI se reunieron con el fin de analizar en profundidad las conclusiones del informe "Niños pequeños, grandes desafíos VIII" de la OCDE, compartir puntos de vistas según sus respectivos contextos y elaborar estrategias conjuntas sobre el camino a seguir hacia una educación infantil temprana inclusiva y accesible para todos.
“Tras años de incidencia sindical, se ha fomentado una importante tendencia política a nivel mundial con respecto a garantizar una educación de calidad para todos y todas y, especialmente, a asumir un mayor compromiso y acción a favor de una educación infantil temprana equitativa, inclusiva y accesible”, declaró Haldis Holst, secretaria general adjunta de la IE.
Holst acogió con satisfacción las Recomendaciones de las Naciones Unidas para una profesión docente sólida y resiliente en el sector, así como la iniciativa a favor de introducir un nuevo protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño que “reconocería explícitamente el derecho a la educación de la primera infancia y alentaría a los gobiernos a que la educación preescolar sea universal y gratuita para todas las niñas y los niños”.
Holst hizo hincapié en que invertir en docentes de educación infantil, garantizar sus derechos laborales y velar por que cuenten con salarios y condiciones laborales decentes es fundamental en este proceso.
OCDE: la escasez de personal constituye un obstáculo importante para la prestación de la educación infantil
Carlos González-Sancho, de la División de Educación Infantil y Escolar de la Dirección de Educación y Competencias de la OCDE, presentó a los sindicalistas de la educación las principales conclusiones del informe "Niños pequeños, grandes desafíos VIII" de la OCDE.
Las investigaciones demuestran que la educación infantil temprana puede mejorar los resultados de todos los niños y niñas, al tiempo que reduce las desigualdades en las primeras etapas de la vida, antes de que se agraven. No obstante, muchas niñas y niños no reciben este tipo de educación. Así pues, a los 5 años, ya se observan importantes diferencias en lo referente al desarrollo cognitivo, social y emocional entre los niños que provienen de entornos favorecidos y los que provienen de entornos desfavorecidos.
La asequibilidad, la accesibilidad y la disponibilidad son obstáculos directos para la participación en la educación infantil temprana.
En muchos países de la OCDE, la escasez de personal sigue siendo un obstáculo importante a la hora de ampliar la oferta de educación infantil temprana. La mayoría de los centros de educación infantil temprana en todos los países participantes en la encuesta de TALIS Starting Strong 2018 comunican escasez de recursos humanos, lo que pone de relieve la incapacidad del sector para atraer, formar y retener al personal.
Según la OCDE, la baja remuneración y las difíciles condiciones laborales socavan los esfuerzos destinados a atraer y retener a personal docente cualificado. Garantizar que los salarios se adecuen a las funciones y responsabilidades del personal de educación infantil temprana resulta esencial para atraer a más personas a la profesión y fomentar la calidad.
¡Por la pública! Creamos escuela para la infancia temprana
Las conclusiones del informe de la OCDE resonaron no solo entre los sindicatos de la educación de los Estados miembros de la OCDE, sino los sindicatos de todo el mundo. Los sindicalistas de África, Europa, América Latina y América del Norte expresaron preocupaciones similares acerca de un sector infrafinanciado y una profesión subestimada y mal remunerada.
Los sindicalistas se unen a la campaña ¡Por la pública! Creamos Escuela de la IE para exigir a los gobiernos que financien completamente una educación infantil temprana, pública, gratuita y de calidad para todos y todas, e inviertan en el personal docente, que constituye el factor más importante a la hora de lograr una educación de calidad. Esto implica garantizar los derechos laborales y asegurar buenas condiciones de trabajo, así como cargas de trabajo manejables y salarios competitivos para el personal de educación infantil temprana.
Estas reivindicaciones sindicales están en consonancia con las Recomendaciones de las Naciones Unidas que instan a una mayor inversión en educación infantil temprana, salarios justos y buenas condiciones laborales para el personal de educación infantil temprana, formación de calidad y políticas generales para atraer y retener a los docentes y las docentes.
La Internacional de la Educación y sus organizaciones miembros seguirán abogando por la educación infantil temprana como parte integral del derecho a la educación y por los derechos de los trabajadores de la educación infantil temprana en todo el mundo.